FICHA ARTÍSTICA
Creado e interpretado por:
Ari Saavedra,Asaari Bibang, Daniel Cuadrado, Marisol Rozo, Raúl Tirado
Puesta en escena e idea original:
Rosario Ruiz Rodgers
Texto dramatúrgico:
Claudia Tobo
Escenografía y vestuario:
Silvia de Marta
Iluminación:
Alberto Rodríguez, “Calamar”
Música original:
Julián Mayorga
Rio claro, Colombia caminos para la paz es una pieza escénica concebida como un viaje profundo para llevarnos hacia nuestro propio corazón.
Romelia y Margarita, dos jóvenes madrileñas, viajan a Colombia para cumplir con la última voluntad de la madre de Margarita: que lleven sus cenizas a su pueblo natal. Las jóvenes descubrirán un país y una historia que les afecta más de lo que imaginaron, son hijas de la guerra y lo descubrirán en medio del posconflicto colombiano, con la memoria y el perdón como una constante que tocará a las puertas de su vida sin previo aviso.
Historias llenas de luces y sombras, donde se trasluce el ser humano que batalla por recuperar la sensatez, la alegría, el amor y la dignidad.
Somos un equipo multidisciplinar de trece artistas que, a raíz del Acuerdo de paz firmado en Colombia en el año 2016, y ante la desinformación e incomprensión, de gente cercana y lejana, sobre lo que está ocurriendo allí, decidimos apostar poéticamente por un documento escénico de ficción.
Nos adentraremos en una cultura hermana que festeja la vida, que busca reconciliación y verdad, que clama justicia y recuperación. Una cultura poblada de mujeres que han liderado la paz y la confraternidad en todo momento. Tal vez después de este viaje nos demos cuenta de que Latinoamérica no está tan lejos, de que nuestras vecinas del barrio son mujeres luchadoras y emprendedoras que tienen mucho que aportar a nuestra sociedad.
Transmitiremos a una sociedad europea el sentir de una patria hermana lastrada por el estigma de la guerra. Abriremos el diálogo a los madrileños, a los desplazados o exiliados para que participemos todos de un conocimiento veraz de lo que ocurre en otras latitudes.
Nuestra organización es colaborativa, el proceso de creación artística está fundado en la aportación de todos y paralelamente hacemos trabajo comunitario a través de talleres y encuentros.
La infraestructura está apoyada en Curtidores de Teatro y La Máquina Poética, dos colectivos que llevan más de diez años trabajando.